enero 23, 2017

“Ser alpinista es algo más que subir montañas”

El alpinista Carlos Soria visitó la estación de Aramón Formigal-Panticosa

“Ya ves qué poquita cosa soy”, dice al presentarse, sonriendo. Es Carlos Soria, quizás un poco menudo sí, pero fuerte, vigoroso, y flexible. A sus 77 años (78 el próximo 5 de febrero) todo un referente en el alpinismo español después de haberse convertido en el único de más de 60 años en haber alcanzado las cumbres más altas de la Tierra.
Acaba de terminar de bajar el mayor desnivel de la estación, desde la pista valle de Tena hasta Estrimal, en Panticosa. Nos dice que es “sólo un entrenamiento” que ha disfrutado, por la belleza del valle de Tena y porque “no hace falta que sea un 8.000 para disfrutar de la montaña”.
Soria te atraviesa con su mirada, unos ojos que han visto el mundo desde sus 13 cimas más altas. Ahora le falta sólo la última para completar su proyecto: convertirse en la persona con más edad en alcanzar la cumbre de las 14 montañas más altas del mundo. Y lo hará, si todo sale bien, este próximo mes de marzo con la ascensión al Dhaulagiri. ¿Y cuándo lo consiga?: “Seguiré haciendo las cosas que me gustan. Para mí los retos son diarios, aunque sí tengo el objetivo de hacer una salida a la Antártida con esquís”, responde Soria.

“No hace falta que sea un 8.000 para disfrutar de la montaña”

“Ser alpinista es algo más que subir montañas. El subir a la cumbre está bien, pero no es lo más importante. Conocer esos países, y a sus personas, es lo verdaderamente importante”, comenta. Tanto que Soria ya ha construido 4 escuelas para niños en pueblos perdidos, en medio de la nada, con su ONG Ayuda Directa Himalaya. Porque “te implicas en una vida distinta”.

Carlos Soria
Carlos Soria, en su estancia en Aramón Formigal Panticosa

Hablando de niños, le preguntamos por sus cuatro hijas, ¿han seguido también tus pasos? Y la respuesta, no podía ser otra: “Por supuesto. Mi hija mayor cumplió los 50 años en la Anapurna, y las cuatro son muy deportistas, y muy buenas. Cuando las veo me da la sensación de que no he hecho las cosas mal….”, dice sonriendo con orgullo.  Con ellas, por cierto, pasó sus navidades esquiando en Aramón Cerler, nos comenta.

“La vida de un jubilado es fantástica es el principio de una nueva vida”

Carlos Soria acaba de publicar su biografía, con el apoyo de Darío Rodríguez. “Es casi la historia del alpinismo español. Casi 77 años que me ha emocionado volver a recordar, sobre todo el día de la presentación, a donde acudieron 23 personas todos ellos relacionados conmigo, fue uno de los momentos más emocionantes de mi vida”. ¿Más que subir al Everest? “Diferente…. Éste es un libro que se va a quedar ahí, y va a servir de inspiración a otras personas”.
Y con esa inspiración le preguntamos qué consejos daría a la gente joven que empieza en esto de la montaña: “Que sean felices, y que lo hagan porque les gusta, no por dinero o porque alguien les obligue a hacerlo”. ¿Y a las personas mayores? “Que se muevan, que todavía les queda mucho. La vida de un jubilado es fantástica, y si consigues llegar a ella en buenas condiciones físicas y psíquicas, y un poco de dinero, es el principio de una nueva vida”.
Gracias Carlos, gracias por la visita a Aramón Formigal Panticosa, y suerte en todos tus proyectos.