febrero 21, 2015

Accesorios de esquí para la cabeza: cascos, gorros y orejeras

El casco protege la cabeza. Esta verdad indudable –tan aceptada en otros deportes como el ciclismo- parece suficiente motivo para

El casco protege la cabeza. Esta verdad indudable –tan aceptada en otros deportes como el ciclismo- parece suficiente motivo para entender por qué cada vez más esquiadores deciden utilizarlo en las pistas, aunque a otros todavía les cueste aceptarlo como parte de su equipamiento.
Ya hemos hablado de cómo escoger la ropa para esquiar, o las gafas de sol. Hoy nos vamos a ocupar de otros accesorios para la cabeza, que proporcionan seguridad, calidez y bienestar a la hora de esquiar o hacer snow.
Ya hemos dicho que el casco es un accesorio. Su uso no es obligatorio, pero sí muy recomendable, tanto en el caso de los niños –entre los que su uso es más generalizado- como en el de los adultos. Se trata de un elemento importante de seguridad, que puede evitar daños graves a quienes lo usan –rebaja las consecuencias de un golpe en la cabeza en el 99 % de los casos-, y especialmente útil cuando nos movemos fuera de pistas, donde el riesgo es mayor.
Si has decidido comprar un casco y no sabes cómo elegirlo, te damos unos consejos que te ayudarán a escoger el más adecuado. En primer lugar, debe estar homologado para la práctica del esquí o del snow –no sirve el mismo para las dos actividades- y debe ser de tu talla. Esto, que puede parecer una tontería, es algo esencial para garantizar tu seguridad. Aunque las tallas vienen dadas por la medida del contorno de la cabeza, es imprescindible probarse el casco antes de comprarlo. No compres una talla M sólo porque hayas llevado otro casco de esa misma talla –las diferencias entre un fabricante y otro pueden ser notables y, además, la morfología de tu cabeza es distinta a la de cualquier otra persona, por lo que tal vez un casco de una determinada forma te quede bien de la talla M y de otro necesites la L.
Casco-y-Accesorios-Nino-esquiando
Al probarte el casco debes asegurarte de que no te queda ni apretado ni suelto, debes poder moverlo ligeramente. La cinta de sujeción debe ser lo suficientemente larga para quedar firmemente ajustada a tu barbilla, pero sin apretar. Y asegúrate de que el casco no te va a impedir tener una buena visión.
Hay cascos rígidos, que cubren completamente las orejas y están pensados para el esquí –protegen las orejas en caso de caída lateral-; mientras que para practicar snow se suelen utilizar cascos con material blando en la zona que recubre las orejas, ya que las caídas laterales son menos frecuentes y son cascos mucho más cómodos. Además, en casi todos los cascos se pueden extraer las esponjas de las orejas, lo que permite mejorar la audición y que entre el viento para refrescarte cuando hace mucho calor.
De hecho, hay cascos con ventilación. Son algo más caros –puedes comprar uno sin ventilación por alrededor de 30 euros y con ella por unos 40 euros- pero evitarán la sudoración y mantendrán tu cabeza fresca cuando suban las temperaturas.
Además, hay cascos con dispositivo bluetooth incorporado, lo que te permitirá escuchar tu música favorita y seguir conectado al móvil.
Si usas casco ya llevas la cabeza y las orejas calientes. En caso contrario, debes llevar la cabeza cubierta por un gorro o, al menos por unas orejeras o una cinta que las mantenga cubiertas y te dé calor. Las hay de todos los tipos, formas, colores y tejidos, así que puedes elegir según el día –la temperatura, el sol, la lluvia o el viento-.
Casco-y-Accesorios-Grupo-Esquiadores
Son accesorios que puedes adquirir a precios aptos para todos los bolsillos, aunque también puedes dejarte llevar por los novedosos diseños de algunas marcas algo más caras. Pero recuerda que la función fundamental del gorro de esquí es mantener tu cabeza caliente, así que elige un modelo –de lana, forro, thinsulate, o una combinación de distintas fibras- que abrigue bien, y asegúrate de que te cubre las orejas por completo y de que te queda bien sujeto y no lo vas a perder al coger velocidad en las pistas.